era dicharachero, sí, un tipo simpático, positivo, pero aquella nota de despedida lo dejó hecho polvo: lo siento me voy, después de tantos besos ya perdí la esperanza de que seas mi príncipe
Una estupidez... Dejar a una rana por no convertirse en príncipe es una desactualización en toda regla. Que se busque alguien acorde con los días que corren...
Ahora todos los príncipes están deseando convertirse en ranas.... jaja
Que cambie de charca, y en poco tiempo, ni se acordará de la de la nota...
Siempre le digo a mi mujer que en casa no tiene más príncipes que nuestro hijo Álvaro y las galletas De Beukelaer, por lo demás ni príncipe, ni caballero, ni caballos blancos ni armaduras relucientes, me tiene a mí de rana aunque con pelo.
p.d. pobre Gustavo, da la impresión de quererse suicidar.
Pues ella se lo pierde, porque donde esté Gustavo , "el reportero más dicharachero", se quite cualquier príncipe, rey o infante... aprovechando (que es gerundio) me permitirás que grite a los cuatro vientos: "Viva la República":) Besos
Ya...pero no se para que se marcha, si al fin todos los príncipes se convierten en sapos y las princesas en ranas, pero encantadores y arrejuntaos, están mejor xDD
Ohhh, esta ranita se la considera ya Vintage!! :) jajajaja Pues mira... si la nota decía eso... es que estaba de "no ocurrir", así que dile a Gustavo que no se preocupe, que cuando es que no, es que no... hay cosas que en el fondo tienen su explicación, y es posible que le estén haciendo un favor (aunque ahora Gustavo piense que no). Un abrazo enorme!
la filosofía del que escribió el comentario anterior me da un poco de envidia: ser capapaz de ver esos ocultos designios favorecedores en las cosas de la vida que son una putada, lo mires por donde lo mires. Pobre gustavo: por qué tenía que convertirse en el príncipe de nadie? el solo deseaba que le quisieran como una rana, como el reportero más dicharachero... yo también estaría cabizbaja y cejijunta aunque lo que debería sería estar mándandole una nota cargada de ironía a la novia besucona.
Bos días amicus: Cuando los caracteres son imposibles, es que son imposibles; le dijo la mosca al anfibio. No por la posibilidad de confraternizar, sino porque las moscas son muy molestas fuera del agua. Sacan de quicio. Breves saludos efímeros Ogol DEIC amicus...
ainsss pero era ella acaso la reina de corazones de alicia? entonces pa que quiere un príncipe? si ella no lo quiere me lo llevo yo jajaja que ternura de foto ¬¬
Muy bueno Raúl!
ResponderEliminarYo le doy un beso si quiere, pero yo no soy princesa. Al contrario, soy la bruja fea ;)
Un beso o 2 #
jajajajajajaja
ResponderEliminarHasta el pobre Gustavo está desilusionado, esta es una crisis ¡global y preocupante!
Fdo:
Una reportera a la que también le dejaron una nota.
Una estupidez... Dejar a una rana por no convertirse en príncipe es una desactualización en toda regla. Que se busque alguien acorde con los días que corren...
ResponderEliminarAhora todos los príncipes están deseando convertirse en ranas.... jaja
Que cambie de charca, y en poco tiempo, ni se acordará de la de la nota...
La perseverancia tiene un límite, y un beso a una rana por muy reportero dicharacero que sea tiene miga, con lo que más de uno....
ResponderEliminarMuy bueno Raúl
Pero la nota no es de Peggy, ¿verdad?
ResponderEliminarBesicos
Y eso después de darse a las drogas, supongo... http://armario-de-maria.blogspot.com/2009/02/como-hacer-un-buen-porro-con-la-rana.html
ResponderEliminarque bueno!!!!
ResponderEliminarGenial!!!!
ResponderEliminarY de paso pensar cuanta gente espera de nosotros lo que nunca seremos...
:P
Tu si que eres genial!!
Pobrecito Gustavo, tan apenado. Pero cuando menos se lo espere se le pasará la tristeza. Y se dará cuenta que la de la nota no valía la pena.
ResponderEliminarSiempre le digo a mi mujer que en casa no tiene más príncipes que nuestro hijo Álvaro y las galletas De Beukelaer, por lo demás ni príncipe, ni caballero, ni caballos blancos ni armaduras relucientes, me tiene a mí de rana aunque con pelo.
ResponderEliminarp.d. pobre Gustavo, da la impresión de quererse suicidar.
Pues ella se lo pierde, porque donde esté Gustavo , "el reportero más dicharachero", se quite cualquier príncipe, rey o infante...
ResponderEliminaraprovechando (que es gerundio) me permitirás que grite a los cuatro vientos: "Viva la República":)
Besos
No sé porqué os preocupáis por él, vive conmigo y la mar de felices que somos....aquí está la prueba gráfica...
ResponderEliminarhttp://masqueperras.blogspot.com/2011/12/parad-el-mundo-que-me-apeo.html
Kisses!!
Pobre Gustavo. No se lo merece.
ResponderEliminarYa...pero no se para que se marcha, si al fin todos los príncipes se convierten en sapos y las princesas en ranas, pero encantadores y arrejuntaos, están mejor xDD
ResponderEliminarPobre rano, que le den un voto de confianza.
ResponderEliminarQue sí, que todo pasa. Hasta lo bueno...pobre Gus....cachis!
ResponderEliminarSaludos
triste, pero fantástico!
ResponderEliminarPues a mí Gustavo me mola. Aún siendo rana es más príncipe de los que he conocido.
ResponderEliminarEsta ranita pertenece ya a toda la humanidad. Es un icono del siglo XX.
ResponderEliminarOhhh, esta ranita se la considera ya Vintage!! :) jajajaja
ResponderEliminarPues mira... si la nota decía eso... es que estaba de "no ocurrir", así que dile a Gustavo que no se preocupe, que cuando es que no, es que no... hay cosas que en el fondo tienen su explicación, y es posible que le estén haciendo un favor (aunque ahora Gustavo piense que no).
Un abrazo enorme!
la filosofía del que escribió el comentario anterior me da un poco de envidia: ser capapaz de ver esos ocultos designios favorecedores en las cosas de la vida que son una putada, lo mires por donde lo mires.
ResponderEliminarPobre gustavo: por qué tenía que convertirse en el príncipe de nadie?
el solo deseaba que le quisieran como una rana, como el reportero más dicharachero...
yo también estaría cabizbaja y cejijunta
aunque lo que debería sería estar mándandole una nota cargada de ironía a la novia besucona.
Me ha gustado mucho.
pobre... le salió rana ... pobre...
ResponderEliminary peggy la cerdita?
ResponderEliminarpor algo en el sur se llama la rana rené
ay pero como! si es a la unica rana que no se debe abandonar!
ResponderEliminareso es que no encontró a su princesa perfecta... dile que se pase por mi casa jajajjajaja nooo que es coña... seguro que termina encontrando a una.
ResponderEliminarY yo que siempre he preferido las ranas...
ResponderEliminarPobre Gustavo.
Un beso
Al otro lado de la bahía... siguen las torres enormes...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
A veces reaccionamos...demasiado tarde!
ResponderEliminarJajajajaja, siempre me dejo las sonrisas aquí.
ResponderEliminarM.
Bos días amicus:
ResponderEliminarCuando los caracteres son imposibles, es que son imposibles; le dijo la mosca al anfibio. No por la posibilidad de confraternizar, sino porque las moscas son muy molestas fuera del agua. Sacan de quicio.
Breves saludos efímeros
Ogol DEIC amicus...
Yo me quedo con el!!! Pobre.....
ResponderEliminarJe je
ainsss pero era ella acaso la reina de corazones de alicia? entonces pa que quiere un príncipe? si ella no lo quiere me lo llevo yo jajaja que ternura de foto ¬¬
ResponderEliminarA veces las expectativas son demasiado altas... Pobre Gustavo, empatizo profundamente con el... Snif,
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