científicos con formación musical han traducido las secuencias genéticas que analizaban en sus laboratorios en partituras, transformando las complejas cadenas de aminoácidos en notas. incluso existen trabajos editados, como las variaciones sobre la molécula timildato sintasa A de la bióloga y pianista rie takahashi. por si quedaba alguna duda, estas obras músicocelulares suponen la constatación de que todo nuestro entramado estructural biológico tiene una intención armónica. asienta una cadena genética en una partitura y obtendrás una melodía, invariablemente. somos música! otro ejemplo muy revelador es el trabajo del bioingeniero gil alterovitz, que comprobó que las células enfermas de pacientes con cáncer suenan desafinadas. asombroso cuerpo humano, no?
Jo macho de verdad que es impersionante, realmente no sabemos nila mitad de lo uqe más tendríamos que saber que es nuestro cuerpo y nuestro cerebro.
ResponderEliminarComo deben sonar mis celulas?
Increíble y maravilloso :-)
ResponderEliminarUna pasada...
ResponderEliminarAdemás eso me recuerda a la teoría de cuerdas que plantea la hipótesis de que en realidad las partículas mas pequeñas que componen la materia, aquellas que componen los elementos de los átomos son cuerdas que vibran y que es la diferencia en las vibraciones lo que compone y crea la materia en sus distintas apariciones. Con lo que puede que si, seamos música y además dependiendo de nuestros acordes somos unos u otros...
genial no?
Pero asombroso!!!! Me alegro de que la genética concluya que somos música, desde luego yo soy música, eso seguro, no puedo vivir sin ella:).
ResponderEliminarMuy interesante esta información que nos traes, Raúl.
Lo que me dejó perpleja es que los enfermos de cáncer "suenen desafinados"... Naturaleza sabia y humanos torpes que no siguen su llamada...
Besos
Joer, qué cosa más curiosa. Vaya tela.
ResponderEliminarAlucinante! Me ha encantado :)
ResponderEliminarFascinante
ResponderEliminarSí, sí, impresionante. Y seguro que cuando se está de resaca las células suenan a marcha fúnebre.
ResponderEliminarLlevo viendo el título del post en mi barra lateral desde esta mañana pero hasta ahora no lo he leído. Pensaba que iba a ser flipante. Y sí, lo ha sido.
ResponderEliminarCreo que esto y es rizar el rizo no?...no me acaba de convencer el tema...con la necesidades importantes que hay de investigación sobre el cancer...
ResponderEliminarpues a mí, no sé por qué, no me sorprende.
ResponderEliminarseguramente tengo poca capacidad para el asombro.
es más, casi me molesta.
[lo que haría un lacaniano conmigo!]
Siempre he creído firmemente, incluso como bióloga, que somos música. Besos.
ResponderEliminarPues claro, somos química, pero no de cualquier forma. ¡Existe un orden y concierto! Si no no funcionaría.. jaja Así cuando enfermamos algo se desordena en nuestro organismo... ¡se estropea el concierto!
ResponderEliminarNo me sorprende, pero no deja de ser espectacular y precioso. Me encantó el post.
No me sorprende! lo veo hasta casi lógico, la armonía y lo musical es solo una forma de representar el equilibrio existencial. Imaginate que otros cientificos (seguros que del MIT también) trasnformen los movimientos orbitales de los cuerpos celestes... al entrar en partitura un cometa, un meteoro o un pedazo de satelite artificial ingresaran notas a la partitura que ni Charlie Parker podría armonizar. Saludo!
ResponderEliminarSi que había leído algo sobre eso, y que las notas finas y agradabñes armonizaban las moléculas de agua, mimentras qye los gritos no...
ResponderEliminarUna gran terapia la música, eh?
Besicos
Será por eso que nos apasiona tanto la música. No estaría mal poder conocer cual es la melodía que cada uno encierra en si mismo. Luego incluso podríamos hacer remixes con las de los demás. :)))
ResponderEliminarMuy chulo este sonido genético.
Joder! Esto esto me parece increíble.
ResponderEliminarMuchas gracias.