una noche soñé que había hecho un pacto con el diablo y estaba a mis órdenes. todo me salía maravillosamente bien; todos mis deseos eran anticipados y satisfechos con creces por mi nuevo sirviente. ocurrió que, en un momento dado, le di mi violín y lo desafié a que tocara para mí alguna pieza romántica. mi asombro fue enorme cuando lo escuché tocar, con gran bravura e inteligencia, una sonata tan singular y romántica como nunca antes había oído. tal fue mi maravilla, éxtasis y deleite que quedé pasmado y una violenta emoción me despertó. inmediatamente tomé mi violín deseando recordar al menos una parte de lo que recién había escuchado, pero fue en vano. la sonata que compuse entonces es, por lejos, la mejor que jamás he escrito, pero resultó tan inferior a lo que había oído en el sueño que me hubiera gustado romper mi violín en pedazos y abandonar la música para siempre…
giuseppe tartini, la sonata del diablo (1713)
¡¡Me encanta!! Es... es... Ayyy... (Suspiro)... ¡¡Me encanta!!
ResponderEliminarEs una melodía maravillosa, se me han puesto los pelos de punta, qué pena que no podamos oír la canción original que tocó el diablo, debió ser algo espectacular :)
ResponderEliminarHola, Raúl... Me encantó esta entrada tuya. Te echaba de menos y me vine al ciber a bloguear un rato.))))
ResponderEliminarEsa sonata suena de "mil demonios". Te envío besos con algo de arena:))))
Nunca se sabe de dónde puede venirte la inspirción. ¡Brrrrr! confío en que la mía venga de la mano de un tierno angelote rechoncho y bonachón.
ResponderEliminarúltimamente oigo hablar mucho de violines y diablos...hay un libro que se titula el violin del diablo y habla de un Stradivarius y una pieza de paganini que se dice la más dificil de interpretar...no se como estara...pero casualmente me encuentro hoy con este microcuento...que de momento si me ha gustado y mucho...es que eres un diablillo!
ResponderEliminarQué magnífica sonata para calmar el espíritu. Aunque hoy va a ser difícil, estoy exultante con la aprobación en el congreso catalán de suprimir la fiesta de los toros en Cataluña. Por una vez el clamor popular ha servido para algo.
ResponderEliminarQue tengas buen día.
Preciosa música y tiene que ser horroroso haber tenido en tu mente algo maravillosos y haberlo perdido del todo, dicen que los sueños, sueños son.
ResponderEliminar¿Dónde está el Diablo cuando hace falta? ¿A cuánto va el kilo de alma hoy? Miraré si cotiza en bolsa.
ResponderEliminarla leyenda de fausto es algo muy usado en la música...
ResponderEliminarbesicos
me gustan tus sueños :)
ResponderEliminarla sonata es... deliciosa!
_abrazos
bueno, en realidad el sueño es de giuseppe tartini, eh? son palabras textuales del compositor, vamos. me faltó el entrecomillado, sorry!!
ResponderEliminar¡Espectacular! Me la guardo para mis paseos nocturnos por los parques de la ciudad.
ResponderEliminarOh qué chulo te ha quedado!
ResponderEliminar¿Sonata del Diablo?. Música Celestial...
ResponderEliminarAyyy cuántos recuerdos me trae el sonido de un violín, me recuerda a alguien en particular.
ResponderEliminarPreciosa sonata, me ha encantado y las palabras que acompañan la entrada son geniales.
"resultó ser tan inferior a lo que había oído en sueño que me hubiera gustado romper mi violín en pedazos y abandonar la música para siempre".
La persistencia es una virtud y los sueños.... sueños son.
Un beso, Raúl.
Azarosa vida que le llevaron a recluirse y tocar el violín hasta ser capaz de componer sonatas tan sutiles como esta dedicada al dios del infierno.
ResponderEliminarExcelente...
Un abrazo.
No podía escuchar nada más apropiado que esta música que nos dejaste hoy, antes de irme a camita...
ResponderEliminarcomenzamos de nuevo la vida rutinaria después de un breve paréntesis!
esa idea de conseguir en sueños lo que luego al despertar se escurre entre los dedos, entre las neuronas, entre los vapores del recuerdo debe ser algo frecuente;
a mí me ha pasado (no con la música :-)
te dejo, que me quedo a escuchar un rato.
buenas noches
Preciosa la melodía, y muy simpática la historia. Lo que hubiéramos dado por escuchar la versión del Diablo...
ResponderEliminarBuenos dias Raul, bella sonata barroca de tres movimientos, como marcaban los canones de la epoca, no me extraña que Tartini, tuviese al diablo en mente, el poderoso cardenal Comaro, lo acuso de abduccion, al parecer por celos de su union en matrimonio en el 1710, con Elisabetta Premazore, favorita del susodicho cardenal, hasta el punto que, Tartini tuvo que esconderse, hasta que pasaran los malos vientos.
ResponderEliminarSe decia, que el maestro tenia seis dedos en su mano izquierda, lo que le permitia ejecutar dificiles notas con su violin.
Son las 7 de la mañana, llueve aqui en Barcelona, esta sonata me ha despertado maravillosamente.
Abrazos muy cordiales.
Jesus
Qué chulada!
ResponderEliminarEl que tuvo retuvo... Y hubo un día en que el diablo fue el ángel preferido de Dios... por algo sería...
Todos los músicos tienen algo de diablos..., de ángeles perdidos, en un pentagrama?...