dolores, prácticamente desde el primer día, siempre sospechaba que sus parejas la engañaban con otras mujeres. tenía celos enfermos, era consciente, sabía que esa desconfianza irrefrenable había precipitado el final de unas cuantas relaciones que podrían haber sido maravillosas, lo sabía, por eso siempre se presentaba de la misma forma cuando conocía a un chico: no me llames dolores, llamame loca.
...o Lola, como la canción :)
ResponderEliminarJoder es que vaya cornamenta lleva la pobre, como para volver a creer en el género masculino
ResponderEliminaruff con lo jodido que es éso de los celos...
ResponderEliminarpero a veces parece que nos va la marcha y exprimimos emociones hasta donde ya no las hay... una especie de "cuelgues emocionales" que no tienen mucho que ver con el amor.
Justamente vengo de leer un blog donde dejaron este artículo en un comentario que va sobre relaciones
amor acción,
o reacción?
lo dejo por si a alguien le interesa
http://www.elpais.com/articulo/portada/termina/amor/elpepusoceps/20100606elpepspor
Extraigo:
"A menos que cada uno de los dos amantes se responsabilice de ser feliz por sí mismo, la relación puede convertirse en un campo de batalla. De hecho, "muchas parejas terminan encerrando su amor en la cárcel de la dependencia emocional, creyendo erróneamente que el otro es la única fuente de su felicidad", apunta Riso. "Es entonces cuando aparecen en escena el apego (creer que sin el otro no se puede vivir), los celos (tener miedo de perder al compañero sentimental), la posesividad (tratar al otro como si nos perteneciera) y el rencor, que nos lleva a sentir rabia e incluso odio hacia nuestra pareja, creyendo que es la causa de nuestro malestar."
jajjajajaja, Dolores y los cuernos... o los cuernos de Dolores, más o menos el orden no varía el producto.
ResponderEliminarPresentarse de esa guisa ante el chico es llamativo, ¡pobre!!!!
Me he echado unas risas contigo y tus imagenaciones y me ha interesado el extracto de El País que dejaba Zeltia.
Besos a ambos.
Si es que la vida es una putada... y con celos insufrible...
ResponderEliminarlola lolyta lola... pobre,., que malo es eso..ains..
ResponderEliminarEstimado caballero:
ResponderEliminarEs mi ilusión animarle a seguir los artículos que iremos publicando en mi humilde blog acerca de la triste situación económica en la que nos hallamos inmersos y la forma torticera en que los funcionarios están siendo usados a modo de cabeza de turco de la crisis.
En este artículo de carácter económico exponemos y comentamos los últimos datos del paro. Es de sobra conocido que para enfrentarse a un problema antes es condición previa conocerlo. Es nuestra humilde intención esclarecer a aquellos interesados en la materia algunas claves de la siempre farragosa economía.
Un saludo afectuoso desde tierras canarias.
cuernos cuernos cuernos siempre tan modernos...como decia el maestro sabina!
ResponderEliminaraclarar que en realidad se trata de unos cuernos imaginados, alucinados, que dolores ve en la mirada de su chico (es un chico lo de la foto, vamos, con sus patillas y eso)
ResponderEliminarMe trajiste a la memoria una vieja canción: "No me llames Dolores, llamáme Lola que tus labios mi nombre sabe a amapola"
ResponderEliminarBuen texto.
Alejandro
Pero el de la foto es un cornudo, no una cornuda... ¿no?
ResponderEliminarQué terribles los celos, para todos, para ellos y ellas... para los que los sufren y para los que "supuestamente" los provocan...
Sálvese quien pueda...
Feliz Find!
jajaja.
ResponderEliminarAplaudo tu ingenio y tu manera de contar las cosas, tu sentido del humor y tu creatividad.
Yo opino como Pitima, para mi que tiene mucho vello en los muslos y parte baja de la espalda para ser una cornuda y no un cornudo.
Muy bueno, Raúl.
Besotes.
Cuantas expectativas pobre lola!!!
ResponderEliminarDebería relajarse un poco....
claro, eso digo, ella cree que él (el chico de las patillas, el de la foto) le trae unos cuernos de regalo, bajo el brazo, para ponérselos, unos enormes cuernos que en realidad sólo existen en la imaginación de dolores, a pesar de su nítida visión alucinada. bueno, eso es al menos lo que me sugería la imagen a mi. vete tú a saber!
ResponderEliminares que de pequeña le faltó afecto, seguro. O que es una optimista bien informada.
ResponderEliminarOff-topic: El widget ese que has puesto me lo he copiao. Pero ya me dirás cómo has colocado "Quizás tb le interese" porque yo no lo veo (se me queda el mensaje en inglés).
ResponderEliminarSólo una cuestión...o me lo parece... o Dolores tiene pelos en el culo...!!!
ResponderEliminarque nooo, que lo de la foto es un chico con patillas, que los cuernos que abraza son imaginados por dolores, como si él los trajera para ponérselos a ella de un momento a otro, entendidos como una amenaza inminente, unos cuernos que son el símbolo universal del engaño entre parejas y que dolores percibe claramente a partir de la mirada, digamos turbia, de su chico, vamos que los podría tocar si alargara la mano, pero que en realidad no existen, son como los fantasmas creados por los celos (la mayoría de las veces, quiero decir), un producto de la paranoia. ya no lo explico más, eh!
ResponderEliminarA mí me habría dado mucha rabia tener que explicarme tanto ;)
ResponderEliminarQué delicada y compleja es la confiaza!!!!
Esto da para hablar un rato...
Un poco triste, y muy SUAVE, Raúl
qué triste y doloroso es sentir celos...
ResponderEliminarme encanta tu historia, y la foto es muy chula!.
_abrazos
Los celos son enfermedad pura, de la mente y del cuerpo. Precipitan la muerte de las relaciones y de uno mismo, la muerte emocional. No deberían existir, no tienen caso. Besos.
ResponderEliminarYa no duele tanto los cuernos, como el ego dolido...
ResponderEliminarBesicos
Jajaja, pues una presentación como esa haría salir corriendo a unos cuantos, no?
ResponderEliminarUna imagenación muy fiel a la triste realidad de algunos-as.
Feliz tarde de domingo. :)
Pobre loca...
ResponderEliminar^_^