locos por la música

paul kalkbrenner, reputadísimo creador de música electrónica en la vida real, interpreta a DJ Ickarus en berlin calling, una película que trata sobre lo destructivo que puede llegar a ser el hecho de tomarse las cosas con desmedido apasionamiento, como la devoción que siente este ícaro por su música, una intensidad que le lleva muy alto, hasta que el sol termina por derretir sus alas. la caída, como era previsible, es monumental. el hombre acaba ingresado en un psiquiátrico, literalmente loco por la música. también porque se pone hasta las cejas día sí, día también, por supuesto, un nivel de endrogamiento que amenazaría peligrosamente el equilibrio interno de cualquiera, por muy fuerte que sea, o crea ser. hace algunos años conocí a un tipo que también se volvió loco por la música, un esquizofrénico que trabajó con nosotros un tiempo, gracias a un programa de integración que suscribió la universidad. antes de enloquecer tocaba el piano en un conjunto de jazz y me confesó que llegó un punto en que todo lo que tocaban sus dedos, los objetos, las personas, se transformaba en música dentro de su cabeza, hasta convertirse en un tormento, algo de lo que no podía escapar. la primera condición exigida cuando empezó el tratamiento fue dejar de tocar el piano. era un tipo alucinante, en todos los sentidos, aunque no parecía muy feliz, desde luego. en fin, no sé si se puede extraer alguna conclusión, o algo, yo os dejo con el vídeo de sky and sand, que también es un resumen de la peli en imágenes, y de postre, después de tanto tiempo de inactividad bloguera, una mezcla de este mismo tema con una canción de esas que nos hacía enloquecer a los levantinos en los últimos 80.

kalkbrenner + the neon judgement