obsessions

así se titula esta preciosa canción de marina and the diamons que descubrí hace unos días en el blog de elena, y que como casi todo lo que proviene de allí, me inspiró. quise potenciar la estructura rítmica con una buena base, y pronto surgieron otras canciones que compartían una esencia parecida. antes era algo constante, casi obsesivo, como el título de la canción, inevitables deseos mentales de implementar la pegada de una canción intensificando los ritmos dentro de la cabeza y las ganas de relacionarla con otras parecidas, enlazarlas, fundirlas. escuchar una canción era escucharla modificándose, relacionándose, como algo orgánico. ahora ya sólo tengo escuchas orgánicas ocasionalmente, aunque sospecho que no desaparecerán del todo. nunca. en total, que todo este rollo sólo era para presentar esta minimuestra de 4 minutos de la canción con un sampler de telephunken, seguida de un tema de nelly furtado, luego phoenix y por último teddy bears... podría ser un interesante comienzo de sesión, no?