mundo loco

suena el timbre de salida del colegio. los niños, con la unión de sus cuerpos, dan vida a las figuras que dibujan en la calle, en movimientos continuos, un suave fluir. la cámara, desde la privilegiada vista que ofrece la azotea del edificio, abandona despacio el plano cenital de los dibujos infantiles hasta llegar al primer plano de gary jules, el autor de mad world, también en la azotea, al lado de nosotros, para terminar al final (siempre suavemente, en movimiento continuo) en otra azotea, con el piano. mensaje de futuro esperanzador, a pesar de lo triste de la canción, el de unos niños que se unen generando cosas positivas, hermosas, en un mundo cada vez más loco.
lástima que luego crezcamos todos.